En ese escenario, la gestión de gastos no es la excepción.
En efecto, las herramientas digitales con IA Generativa, que crea contenido nuevo a partir de datos de entrada como texto, imágenes, audio o video, pueden escanear boletas y facturas de forma automática, extrayendo todos los datos necesarios para generar reportes de gastos sin necesidad de ingresar información manualmente, simplificando y acelerando el proceso de rendición de gastos.
Así, el escaneo inteligente de recibos y documentos extrae de manera automática información esencial como la fecha, total, proveedor, moneda y otros campos clave, optimizando el proceso de captura de datos de manera eficiente y evitando errores.
Gracias a la capacidad de aprendizaje continuo de este tipo de herramientas, la optimización de estos procesos es permanente, por lo que se adaptan y evolucionan constantemente para ofrecer resultados cada vez más eficientes.
Asimismo, la lectura avanzada de documentos se traduce en mayor flexibilidad para manejar diferentes tipos de archivos, incluyendo facturas físicas y facturas digitales.
Más aún, sus versiones móviles permiten a los usuarios capturar recibos con sus smartphones en cuestión de segundos, mejorando la experiencia del usuario.
En esa línea, los asistentes virtuales son otra innovación que aportan a que esa experiencia sea óptima, al convertirse en un apoyo y acompañamiento para el usuario, respondiendo consultas de manera eficiente y anticipándose a las necesidades de los usuarios, entregando soluciones automatizadas y personalizadas.
Así, lo cierto es que estas soluciones con IA son capaces de procesar grandes volúmenes de datos para identificar patrones, lo que permite sugerir acciones y resolver tareas con gran precisión, a una velocidad que supera las capacidades humanas, lo que conlleva una mayor productividad y una gestión más efectiva de los recursos.
Hay empresas que están desarrollando sus propias funcionalidades con IA para mejorar los procesos manuales, ahorrar tiempo y evitar errores.
En definitiva, la IA marca un hito en la automatización de procesos administrativos y financieros.
Esto permite una gestión más ágil y precisa, además de liberar a los usuarios de tareas repetitivas, transformando la gestión de gastos en un proceso más eficiente y proactivo, elevando el estándar de servicio y productividad en el ámbito empresarial.