En un contexto de transformación digital acelerada, las redes sociales se convirtieron en una de las principales fuentes de educación financiera entre los jóvenes.
Según el informe “El valor de aprender”, elaborado por Santander junto a IPSOS en 10 países, uno de cada tres jóvenes (16-24 años) recurre a estas plataformas para aprender sobre finanzas.
El fenómeno cobra especial relevancia en Argentina: mientras el 33% de los jóvenes elige las redes o creadores de contenido, el 86% dice no haber recibido ninguna educación financiera en la escuela.
Esta cifra es una de las más altas del estudio a nivel mundial, aunque el 84% de quienes no recibieron estas clases afirma que le habría gustado tenerlas.
Paradoja y riesgo digital
El estudio, basado en 20.000 encuestas, expone una paradoja global: el 61% de las personas afirma tener conocimientos financieros, pero solo el 11% se siente realmente informado.
Al medir conceptos básicos en Argentina, solo el 27% de los encuestados respondió correctamente una pregunta sobre inflación.
En el país, la cifra de jóvenes que se informa en redes duplica a la de los mayores. Esta exposición tiene un costo: 7 de cada 10 jóvenes fueron víctimas de intentos de estafas digitales, y casi 1 de cada 4 cayó efectivamente en fraudes online.
El 95% de las personas consultadas reconoce los beneficios de recibir educación financiera: 64% cree que ayuda a tomar mejores decisiones y 59% que permite gestionar mejor el dinero y las deudas.
El rol de los bancos
Ante la ausencia de espacios formales, las redes se transformaron en un terreno fértil para los finfluencers.
El informe advierte que, sin educación crítica, esta información puede convertirse en una nueva forma de desinformación.
Alejandro Butti, CEO de Santander Argentina, señaló: “El desafío no es solo enseñar a manejar el dinero, sino acompañar a las personas para que puedan tomar decisiones informadas y responsables en un entorno digital cada vez más dinámico”.
El informe indica que 9 de cada 10 personas creen que los bancos tienen un rol clave en educar.
En línea con esto, Santander desarrolla iniciativas de educación financiera orientadas a diferentes grupos, con el foco en la prevención de estafas virtuales y el uso responsable del dinero.
