Un nuevo estudio del World Economic Forum (WEF) y Accenture demuestra que en general, las inversiones en IA y sus usos han aumentado de manera significativa en los últimos años y que se espera que este crecimiento continúe a nivel global.
Ambas entidades proyectan que el gasto relacionado con la IA en diversas industrias alcanzaría aproximadamente u$s 630.000.000.000 para 2028, creciendo a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de 29% desde 2024 hasta 2028, junto con un ingreso anticipado de casi 1 billón de dólares.
La IA Generativa, en particular, ha sido un contribuyente importante a este crecimiento, con sus capacidades evolucionando a un ritmo sin precedentes.
El gasto corporativo global en esta tecnología ha crecido significativamente, con proyecciones de un crecimiento de 59% desde 2024 hasta 2028, alcanzando más de u$s 200.000.000.000 a nivel global para 2028.
Sin embargo, aunque la IA analítica ha sido ampliamente adoptada en diversos sectores, la IA Gen sigue estando en sus primeras etapas de adopción. Aunque muchas organizaciones han experimentado con la IA a través de proyectos piloto y pruebas de concepto, escalar estos esfuerzos para lograr un impacto sostenido y transformador sigue siendo un desafío significativo.

Para transformar verdaderamente las industrias y permitir que las organizaciones aprovechen plenamente sus beneficios, la IA debe ser adoptada en alineación con los principales objetivos de negocio.
Francisco Rojas, líder de Data & AI de Accenture Chile
“Esto implica integrar la IA profundamente en las operaciones, estrategias y procesos de toma de decisiones, avanzando más allá de iniciativas aisladas o experimentales”, prosiguió.
El estudio del WEF y Accenture muestra que, aunque algunas industrias parecen estar más avanzadas en la adopción de la IA, las organizaciones individuales muestran una variación significativa en la profundidad y escala de sus esfuerzos.
Notablemente, el 74% de las empresas reporta desafíos en la adopción de la IA a gran escala, con solo 16% de las empresas preparadas para la reinvención impulsada por la IA.
El ejecutivo concluyó que “las organizaciones deben priorizar aplicaciones que entreguen valor tangible y medible, y enfocarse en escalar su adopción en toda la empresa. Esto requiere identificar casos de uso de alto impacto, optimizarlos, construir un plan estratégico para una implementación más amplia y, lo que es importante, aprender de sus pares de la industria y compartir las mejores prácticas para acelerar el crecimiento, evitar errores comunes y desbloquear el potencial completo de la IA”.