Latinoamérica se enfrenta a una tasa elevada de ciberataques en el primer semestre de 2025.
Las organizaciones de la región sufren un promedio de 2716 ataques semanales, un 39% más que el promedio semanal mundial de 1955.
Nuevos análisis de Check Point Research revelan una creciente ola de amenazas, caracterizada por malware avanzado, operaciones vinculadas a gobiernos y vulnerabilidades asociadas a plataformas en la nube.
Las industrias más atacadas incluyen las gubernamentales/militares, la atención médica y las comunicaciones, con incidentes semanales que oscilan entre más de 3800 y casi 4200.
Esto representa un aumento con respecto al informe anterior sobre amenazas en Latinoamérica, publicado en febrero de 2025.
La explotación de vulnerabilidades más común en la región es la divulgación de información, que afecta al 75% de las organizaciones.
El 62% de los archivos maliciosos en Latinoamérica se enviaron por correo electrónico en los últimos 30 días. Entre las principales amenazas se encuentran tres RAT, dos botnets (FakeUpdates, Androxgh0st) y un descargador (FakeUpdates).
Además, marcas como Microsoft, Google y Apple se encuentran entre las más imitadas en campañas de phishing.
El ransomware continúa como una de las principales ciberamenazas, con delincuentes que pasan del cifrado a la extorsión por filtración de datos.
Los ataques de ladrones de información han aumentado un 58%, especialmente dirigidos a tokens y credenciales de VPN en entornos BYOD. También se observa un incremento en brechas de seguridad en la nube: el 65% de las organizaciones ha sufrido incidentes.
La inteligencia artificial se presenta como un arma de doble filo. Según el Informe de Seguridad de la IA 2025, actores maliciosos la utilizan para suplantación de identidad mediante deepfake, desinformación, malware generado por IA y explotación de modelos de lenguaje en la dark web.
Se recomienda una estrategia centrada en la prevención, con defensas basadas en IA, inteligencia de amenazas y gestión proactiva de vulnerabilidades, para detener las brechas de seguridad antes de que ocurran.