Entre los grandes desafíos globales, uno de los principales es lograr un desarrollo sostenible y alcanzar los objetivos del Acuerdo de París de 2015. Esto implica transitar hacia una matriz energética diversificada, potenciando el uso de energías renovables y la electrificación de los sectores productivos.
Índices internacionales, como el Energy Transition Index (2020), indican que América Latina está en camino hacia esta transición energética, con Chile, Perú y Bolivia posicionados entre los primeros 70 lugares. Roberto Lepin, director de Servicios Cluster Andino Sur en Schneider Electric (SE), respaldó este avance: “En términos de electrificación, hemos avanzado mucho en los últimos años. Chile lidera la región con la mayor cantidad de generadoras renovables no convencionales, mientras que Perú y Bolivia también impulsan proyectos significativos”.
Para consolidar estos logros, es crucial seguir promoviendo el rol de las energías renovables emergentes, lo que requiere el desarrollo de estrategias sólidas. En este contexto, Víctor Paredes, director de Power System Cluster Andino Sur de Schneider Electric, destacó que “nosotros nos basamos en la digitalización y electrificación, ya que, al integrar ambos conceptos, logramos la sostenibilidad. En cada uno de los pilares energéticos (generación, transmisión y consumo) trabajamos intensamente en la digitalización para optimizar la eficiencia y fomentar el uso de energías renovables, especialmente solar y eólica”.
El rol de la tecnología en la transición energética
La tecnología es crucial para alcanzar los objetivos de descarbonización. Según el artículo de Forbes (2020), ¿Qué impacto tiene la industria tecnológica en la transición de energía verde en Chile?, la adopción de tecnologías que fomenten un desarrollo sustentable y eficiente se convierte en una estrategia clave para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
En este escenario, la Inteligencia Artificial (IA) se perfila como una herramienta fundamental, ofreciendo nuevas alternativas para avanzar en la transición energética. El estudio de Nature (2020), “The role of artificial intelligence in achieving the Sustainable Development Goals”, revela que la IA podría facilitar el cumplimiento del 79% de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y hasta el 93% si se consideran solo los ODS medioambientales.
Bajo este panorama, Lepin indicó que “la IA, al igual que el machine learning, tiene la capacidad de aprender por sí sola. Esto plantea nuevos desafíos tecnológicos, impulsando el desarrollo de nuevos procesos, procedimientos y tecnologías orientadas a mejorar la eficiencia energética”.
Lepin destaca que en SE, la IA no solo optimiza la eficiencia energética, sino que también es clave para mejorar la disponibilidad de energía. “Nuestro objetivo es aumentar la disponibilidad de energía eléctrica mediante redes más eficientes y sostenibles. En este proceso, la rapidez y la disponibilidad de la información son esenciales, y la IA es sin duda la mejor herramienta disponible”, explicó.
Por su parte, Paredes enfatizó la importancia de ser pioneros en la adopción de nuevas tecnologías. “Cuando una empresa se atreve a dar el primer paso, el resto suele seguir. En este contexto, nuestro objetivo es demostrar a las grandes compañías que disponemos de la tecnología necesaria, la cual ya hemos implementado exitosamente en otros mercados. Queremos que estas empresas avancen junto a nosotros. Este es, en esencia, el propósito de nuestra compañía: mostrar la tecnología que hemos desarrollado y motivar a otros a unirse a este avance”, concluyó el ejecutivo.