Desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, se ha hablado mucho sobre el aumento de aranceles, lo que acapara la atención mundial.
Estados Unidos ha mantenido gravámenes sobre varios productos de origen chileno, con la notable excepción del cobre.
Esta decisión, según se ha informado, obedeció a la consideración del cobre como un recurso estratégico de importancia global, lo que llevó a la administración estadounidense a dejarlo fuera de las medidas más restrictivas.
Sin embargo, aunque el cobre no se ve directamente afectado, otros productos sí estarían sujetos a estos impuestos adicionales al momento de entrar al mercado norteamericano.
Para Chile, cuyas exportaciones a Estados Unidos abarcan artículos como fruta fresca, vinos y salmón, cualquier alza en los costos de importación puede repercutir en la competitividad de las empresas locales, afectando tanto a la industria como a los trabajadores que dependen de este comercio.
La Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (SUBREI) señaló que, si bien el Tratado de Libre Comercio entre Chile y Estados Unidos ofrece ciertas salvaguardas, no cubre en su totalidad las medidas unilaterales tomadas bajo pretextos de seguridad nacional o política interna.
Representantes de la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA) y de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (ASOEX) también expresaron su inquietud ante este panorama, subrayando el riesgo de que la imposición de gravámenes, aunque sea de forma indirecta o focalizada, termine por frenar el dinamismo exportador.
En paralelo, el gobierno chileno busca reforzar la diversificación de mercados e insistió, en foros internacionales, en la necesidad de reglas comerciales claras y estables.
Mientras tanto, el sector empresarial se prepara para enfrentar posibles ajustes de costos y fluctuaciones en la demanda.
Aunque el impacto sobre el cobre chileno sea nulo —por el momento—, otras áreas productivas sí podrían verse afectadas por las políticas arancelarias de Washington, un factor que los analistas locales observan con cautela para anticipar medidas de mitigación.